Mi (ahora) esposo y yo tuvimos una LDR muy exitosa durante aproximadamente 2.5 años antes de casarnos.
Nuestra situación se vio agravada por el estrés adicional de los despliegues militares. De alguna manera, siento que el recordatorio constante de la vida / muerte y las cosas más simples en la vida, es lo que ayudó a seguir quejándome al mínimo. Nuestros sentimientos mutuos se pusieron a prueba al soportar situaciones tensas y estresantes. Al final de la mayoría de esos 809 días antes de casarnos, evaluamos con éxito nuestros sentimientos el uno por el otro y si el sacrificio se sintió ‘valioso’ desde cada perspectiva. La respuesta siempre fue sí, así que aquí estamos … ¡2,959 días después!
Nuestra situación era única, pero hay algunas cosas fundamentales que se deben tener en cuenta a la hora de sobrevivir a una relación a larga distancia. Cualquiera que piense en tomar este camino difícil pero gratificante debe tener estas cosas en mente como mínimo:
- Establecer expectativas para la comunicación.
- Hacer tiempo para las noches de la fecha, independientemente de la distancia
- Tener una visión clara para el futuro de la relación.