Todas las mujeres tienden a bajar sus defensas para los turistas, sin importar el país. Soy de Canadá y cada vez que uso un acento por diversión y me acerco a una mujer aquí, parece más receptiva.
Pero, uno no debe confiar en fingir, aunque lo hago por diversión y luego les digo que soy un local, si quiere que las hembras bellas y despreocupadas vayan a España.