¿Alguna vez has tratado con alguien que sigue intentando poner ideas divertidas en tu cabeza y puedes ver descaradamente lo que están haciendo?

En mi primer trabajo de tiempo completo, había una señora mayor que se quejaba constantemente de los problemas y decía que había que resolver algo sobre ellos. Siendo bastante joven, yo, y otros, se enojarían por sus interminables quejas y finalmente diría algo a la gerencia para tratar de resolver las cosas. Donde ella diría de inmediato: “No sé de qué se quejan, no hay nada de malo”. Cuando señalamos que era por lo que ella lloriqueaba más que nosotros, nos llamaba mentirosos.

Esto es cuando descubrí que a algunas personas les gusta “poner las balas en el arma para que disparen otras personas”. Me pareció una valiosa lección para aprender y me alegré de haberla aprendido temprano en mi vida laboral. Me comprometí a plantear solo los problemas con los que personalmente estuve involucrado en el futuro, o en nombre de alguien que pensé que estaba siendo víctima.

Entonces, ahora puedo ver claramente cuando alguien me está preparando para una caída, pero aprendí la lección cuando era joven e ingenua.

Sí. Mi madre. Ella es una persona muy controladora. Ella intenta $ golpear así todo el tiempo. Ella quiere ser el centro de atención, quiere parecerse a la única persona que hace algo correctamente, que salva a todos cuando algo sale mal … Me mudé cuando tenía 16 años. Ahora tiene 70 años. Ella nunca ha cambiado. Paso el menor tiempo posible con ella y no someto a mi familia a su abuso mental. Ella es una narcisista.

Corre, no te alejes, vete. Claramente, no te respetan en el mejor de los casos y, en el peor de los casos, te están capacitando para futuros abusos. De cualquier manera, probablemente no sea la persona que quieres en tu vida.

Yo podría ser esa persona. A menudo pienso que los planes locos son una buena idea. Por alguna razón, la gente abandona bastante a menudo, dejándome solo. Eso está bien sin embargo. Puedo encontrar y dirigir mi propia compañía de ópera. Lo mismo para una clínica gratuita en la zona pobre de mi ciudad. Lo que puede parecer una idea divertida para ti me parece una necesidad. Y es divertido: cuando tengo éxito, esas mismas personas me felicitan y se olvidan de que les pida ayuda.