Un ser querido mío falleció hace tres meses.
“Amado uno” es mi querido perro Alexander, quien fue mi mejor amigo, muchas veces mi único amigo, y confidente durante casi trece años.
Algunos pueden pensar que es casi una falta de respeto hacia el póster de esta pregunta, que me atrevo a referirme a un perro como a un “ser querido”, pero el intenso amor que existe entre dos seres vivos y el dolor de tener que separarse según lo ordenado por las manos de La muerte, nunca se debe subestimar ni intentar comprender.
Herido es herido y herido duele como el infierno.
- ¿Cómo es tener un amigo que tiene el doble de tu edad?
- ¿Por qué es que todos son amables conmigo y también como yo (me han dicho) pero estoy solo y no tengo un mejor amigo?
- Digamos que has hecho una película con tus amigos. ¿Cómo lo vendes ahora?
- ¿Qué se debe hacer cuando una chica trata de atacarte?
- ¿Ser llamado fotogénico un cumplido?
La misma semana de la muerte de Alexander (leída: dos días después de su muerte), confié en alguien en quien confié con este dolor indescriptible que sentía, solo para que esta persona me lastimara incluso más que el dolor por el que ya me había sofocado. ese punto.
En esos dos días, me abandonó por completo porque no cumplía con sus estándares de “centrarse en ser resistente y seguir adelante”, y no le pregunté cómo iban a comenzar sus preparativos para el examen que tenía para escribir en ese momento. Hizo todo sobre ella y me cubrió con demandas egoístas y expectativas inhumanas en un momento en que apenas podía levantarme de la cama; un momento en el que estaba paralizado por el dolor y el dolor por el amor incondicional.
Su falta de ver, hasta el día de hoy, la crueldad de sus acciones, llevó a lo que finalmente había sido el dolor, convirtiéndose en depresión y ansiedad severa.
Entonces, lo mejor que puedes decirle a una persona superada por el dolor y la pena es a veces no decir nada en absoluto. Simplemente estar allí y amar a sus corazones para recuperar la salud, sin importar cuánto demore. El dolor funciona de diferentes maneras para cada uno de nosotros y estar con alguien durante un tiempo tan vulnerable no es más que un momento casi sagrado.
Un momento que debe ser respetado y acompañado por un apoyo incondicional y una inmensa cantidad de amor.
Un momento en el que deberíamos alejarnos del yo y pasar al plato.