- Tú y tu amigo no hablan tanto como antes, las conversaciones son más cortas.
- Es posible que tu amigo no responda a todos tus mensajes, aunque ya los hayan visto.
- Si usted y su amigo están en el mismo círculo de amigos, su amigo podría intentar bloquearlo a veces al no escucharlo o darle la espalda.
- El estado de ánimo de tu amigo parece haber cambiado; no se ven tan felices cuando están contigo como solían hacerlo.
- Tu amigo nunca te pide que salgas más.
- Tu amigo no te sonríe ni te guiña un ojo cuando los ves en público.
etc.