¿Qué tan común es que las personas oculten sus preferencias por lo que consideran “idealmente romántico”?

La respuesta corta es ‘depende’.

En general, depende de:

  • El tipo de personalidad de la persona; y
  • La etapa de la vida en la que se encuentra.
  • La etapa de la relación.

Si una persona es sensible a los sentimientos de la otra persona y tiene la madurez suficiente para comprender que todo lo que es ideal se llama “Ideal” precisamente porque es imposible lograrlo en la vida “real”, las preferencias no se compartirán. Lo que se percibe como el ideal es la culminación de tantas variables, que se vuelve virtualmente imposible crear esa imagen en la realidad.

Por otro lado, algunas personas encuentran mejor ser brutalmente honestos y creer en no esconderse en absoluto. Pueden encontrarlo no solo conveniente sino también necesario para compartirlo todo.

Dicho esto, incluso los tipos más sensibles revelarán sus preferencias cuando estén seguros de que la otra persona se mantendrá cómoda. Este suele ser el caso cuando han pasado un tiempo considerable entendiéndose entre ellos y aceptando sus defectos y belleza.