Las siguientes preguntas son lo que idealmente haría:
1) ¿Hemos discutido cuántos hijos vamos a tener y quién va a ser el cuidador principal?
2) ¿Tenemos una idea clara de las obligaciones y objetivos financieros de cada uno, y nuestras ideas sobre gasto y ahorro se combinan?
3) ¿Hemos discutido nuestras expectativas sobre cómo se mantendrá el hogar, y estamos de acuerdo sobre quién manejará las tareas?
4) ¿Hemos divulgado completamente nuestras historias de salud, tanto físicas como mentales?
5) ¿Es mi pareja cariñosa en la medida en que espero?
6) ¿Podemos discutir de forma cómoda y abierta nuestras necesidades, preferencias y temores sexuales?
7) ¿Habrá un televisor en el dormitorio?
8) ¿Realmente nos escuchamos unos a otros y nos consideramos justamente las ideas y quejas de los demás?
9) ¿Hemos alcanzado un entendimiento claro de las creencias y necesidades espirituales de cada uno, y hemos discutido cuándo y cómo estarán expuestos nuestros hijos a la educación moral / religiosa?
10) ¿Nos gustan y respetamos los amigos de los demás?
11) ¿Valoramos y respetamos a los padres de los demás?
12) ¿Qué hace mi familia que te molesta?
13) ¿Hay algunas cosas que tú y yo NO estamos preparados para renunciar en el matrimonio?
14) Si a uno de nosotros se nos ofreciera una oportunidad de carrera en un lugar alejado de la familia del otro, ¿estamos preparados para mudarnos?
15) ¿Cada uno de nosotros se siente plenamente confiado en el compromiso del otro con el matrimonio y cree que el vínculo puede sobrevivir a cualquier desafío que podamos enfrentar?
¡Mucha suerte amigo, y felicidades por la boda!
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