¿Qué es lo más poderoso, la creencia religiosa, el amor o el dinero?

Tendría que decir creencias religiosas porque es más personal para la persona que tiene esas creencias. Un fuerte creyente de la religión es mentalmente, físicamente emocionalmente extremadamente fuerte. Nada puede sacudir su creencia. Y como todos sabemos, se sabe que las creencias son el poder intrínseco más poderoso que posee un humano.

¿Qué ha hecho la religión a la sociedad? La religión ha llegado a los extremos de la Humanidad y la Inhumanidad, ha cubierto todo el espectro de acciones que un humano puede posiblemente emprender. Ha ayudado a la gente a recuperarse de la miseria, ha hecho que la gente perdone más, ha hecho que la humanidad sea más moral. Por otro lado, ha cobrado innumerables vidas, ha llevado a masacres de la sociedad, ha matado a personas solo por hablar en contra de sus creencias.

El amor puede compararse con las creencias religiosas solo si es amor por Dios o religión. El amor por los actos desinteresados ​​y el amor por la autosatisfacción tienen muchas cosas en común. De hecho, si lo piensas, el amor es siempre personal, nunca impersonal. Lo que amamos lo amamos por nosotros mismos. Compararía las creencias religiosas y el amor, ambos igualmente poderosos, ya que las creencias religiosas también son parte del amor.

Ciertamente no es dinero.

¿Qué es más poderoso: la creencia religiosa, el amor o el dinero?

Un método por el cual se ha medido el “poderoso” es cuando las personas están dispuestas a morir por algo. Otra es cuando las guerras se han librado con el propósito de algo.

Las guerras se han librado y la gente ha estado dispuesta a morir por todo lo anterior. Deben ser igualmente poderosos, dependiendo de la personalidad del individuo y de la situación.

La pregunta es: “¿Cuál es la creencia religiosa, el amor o el dinero más poderoso?”

Yo diría que el más poderoso es el que cualquier persona considera como la más alta prioridad en sus vidas. He conocido personas que morirían por cada una de esas cosas. El que morirían es el más poderoso para ellos. No creo que ninguno de ellos tenga poder en sí mismo. Se trata del poder que les damos a cada uno de ellos en nuestras vidas.