Hay alrededor de 7 mil millones de personas en la tierra. Es conveniente suponer que la mayoría de esos 7 mil millones intentarán ser más astutos que usted y ganarán una ventaja injusta si se les da la oportunidad. Este modelo de vida es la competencia. Las excepciones deben ser familiares y aquellas con las que trabaje amistad con quienes tenemos simbiosis. Para la familia, es obvio que cualquier daño que se le haga a usted también afectará a la familia y eso violaría las leyes de la autoconservación. Los amigos extienden el “nosotros” y comparten todo lo que hacemos o ganamos. Por lo tanto, hacemos amistad con personas de ideas afines con el entendimiento de que nos tratarán de manera justa y abiertamente compartiendo información.
Sin embargo, hacer trampa convierte a la persona en un parásito. Por un lado, él o ella parece contribuir. Él o ella recibe el beneficio (costo compartido, comida, acceso social, etc.) pero lo hace bajo una falsa pretensión. No es infrecuente que una pareja casada quede totalmente en bancarrota como resultado de este comportamiento parasitario.
En resumen, una vez que te das cuenta de que estás haciendo trampa, es bueno tomar medidas rápidas y eliminar la plaga. Si alguien necesita mentir o carece de habilidades sociales para explicar una cierta necesidad y discutir formas de satisfacer esta necesidad de manera mutuamente aceptable, hay pocas esperanzas para un futuro.