“Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento” – Eleanor Roosevelt
Cuando comience el día, dirija su mente a quién es usted y cómo será ese día. En la mañana antes de comenzar, tómese un momento para pensar en algunas cosas por las que está agradecido y en las cosas que tiene para usted: siéntase orgulloso de quién es y dónde se encuentra. Saluden a todos. No respondas ni participes en la negatividad.
Elija enfocarse en lo positivo y sentirse mal por aquellos que están tan llenos de negatividad que tienen que contagiar a los demás.
Date cuenta: las personas negativas son tristes, a menudo las personas enojadas que quieren que seas tan miserable como ellos.
- ¿Por qué siempre pienso en experiencias pasadas, cuando entro en una conversación?
- ¿Qué le digo a un extraño que amo, cuyo nombre no sé, que me debilita las rodillas y con el que cambio de sonrisas todos los días?
- Tengo rasgos de TOC, ¿cómo puedo dejar de sentir que necesito controlar las cosas?
- ¿Está bien que yo (hombre) siempre inicie un apretón de manos, incluso a una dama o alguien más mayor?
- ¿Qué debo recomendar hablar con un extranjero?
Sentirse mal por ellos, pero no dejes que su disposición te infecte.
Avance y mantenga su círculo social optimista, positivo y divertido: el humor es un gran difusor.