No va a suceder durante la noche. Sin embargo, si es lo suficientemente importante para usted, puede lograrse. Primero, tienes que tomar un buen y mirarte a ti mismo. Tienes que decidir qué cosas te gustan de ti y, lo más importante, qué no. Construye sobre lo que te gusta y trabaja en aquellas cosas que no. En segundo lugar, escriba cuáles son sus metas y qué es lo que quiere lograr en la vida. Use algo conocido como objetivos SMART. Estos son objetivos que son simples, medibles, alcanzables, realistas y específicos para el tiempo. Tercero, escriba un plan de acción sobre cómo planea alcanzar estos objetivos. Pregúntese: “¿Necesito ayuda?” Si la respuesta es sí, ¿qué tipo de ayuda y de quién o de dónde la puede obtener? Está perfectamente bien pedir ayuda siempre que sea razonable. Cuarto, encuentre a alguien a quien pueda rendir cuentas, a alguien que no lo dejará ir tan fácilmente. Esto podría ser un terapeuta, un supervisor, un miembro de la familia, una persona del clero o incluso un amigo cercano o un entrenador de vida. En quinto lugar, mantener la puntuación. Si no realiza un seguimiento de sus resultados, no tendrá la menor idea de cómo se encuentra. Se requieren 3 semanas para romper un hábito y seis para hacer uno, así que tenga paciencia. El viaje más lejano comienza con un solo paso.
¡Buena suerte!