Tal vez pueda dar un ejemplo. Alguien te lastima. Te enojas. Le cuentas a un amigo lo que sucedió y el amigo te dice que no debes estar enojado y que debes perdonar a la persona que te hizo daño. Le dicen que es lo correcto y moral, o tal vez solo dicen que es lo “mentalmente sano”. El amigo insiste en que el perdón es necesario para que “sanes”, lo que sea que eso signifique. Lo intentas Pero la persona que te lastimó no lo lamenta y lo hará una y otra vez. Así que ahora estás enojado por ser herido. Pero, también estás enojado con tu amigo por no apoyarte. Y también estás enojado contigo mismo por no poder tomar el camino. Y, para colmo, estás enojado con la persona que te lastimó por ser un imbécil impenitente que continúa lastimando a las personas.
La moraleja de la historia es que puedes lidiar con emociones desagradables la primera vez, incluso si te hacen sentir incómodos a ti y a tus amigos. O puedes lidiar con la bola de nieve gigante de emociones que surgen al tratar de fingir que estás por encima de esa negatividad.