¿Por qué hay poco tiempo para la felicidad y mucho tiempo para la tristeza?

Es porque estamos diseñados de esa manera.

Nuestro funcionamiento cerebral está programado, a través de la selección natural, de tal manera que no nos sentimos eufóricos indefinidamente cada vez que ocurre un acontecimiento feliz en nuestra vida. Esto nos hace desear más y lograr mayores y mejores esfuerzos en la vida.

Digamos, por ejemplo, que pasas el examen realmente difícil o la promoción que siempre soñaste, si te sientes feliz por el resto de tu vida, estarás atrapado allí. No podrás imaginar sueños más grandes para ti mismo y terminarás siendo un bajo rendimiento.

Son estas largas luchas con la tristeza en la vida las que nos permiten desafiarnos a nosotros mismos y darnos cuenta de cosas que en algún momento de nuestra vida nos han parecido inalcanzables.

Esto depende puramente de dónde se encuentre tu felicidad. Si tu felicidad está en una persona, entonces serás feliz mientras esa persona permanezca en tu vida, de manera similar, si tu felicidad está en las cosas materiales, entonces serás feliz mientras tengas esas cosas a tu alrededor.

Los seres humanos siempre estamos buscando la felicidad, pero lo que olvidamos es que la felicidad no es una terminología constante, la felicidad es un sentimiento y, al igual que los sentimientos, sigue cambiando de persona a persona y de cosas a cosas. Para poder ser felices para siempre, debemos encontrar la felicidad en algo que sea permanente (lo que no es posible), todo tiene una fecha de vencimiento y también la felicidad.

La razón por la que la tristeza dura más que la felicidad es porque dejamos de seguir adelante, pasamos del pasado, pasamos de las cosas que perdimos, seguimos adelante con la vida, seguimos adelante con el fracaso. Cuando perdemos a alguien o algo en la vida, también perdemos una parte de nuestra paz que requiere tiempo para sanar y sanar esa herida, nos impacientamos y tendemos a encontrar la felicidad en las cosas temporales y nuevamente terminamos haciéndonos daño. Así que la mejor manera de ser feliz en la vida es ser paciente e ir con la corriente.

La vida es demasiado corta para estar triste por algo, así que ten valor y sigue adelante.