El “pensamiento positivo” proviene de la decisión de interpretar los eventos de una manera positiva.
Las emociones como la ira son el resultado del pensamiento, la interpretación y las creencias. La ira viene de dentro, no de las acciones de otros.
Las creencias son conclusiones pasadas con respecto al significado de las cosas. Ningún niño vino al mundo con una carga de creencias. Nos los enseñan, o los adoptamos por elección. Podemos re-examinarlos o cambiarlos en cualquier momento.
Si toma la decisión de tratar de interpretar las cosas de forma positiva: suponga una buena intención por parte de los seres humanos, suspenda el juicio antes de la prueba, etc., su clima emocional mejorará. Esto no es falso, es una acción consciente de tu parte.
- ¿Cuáles son los tipos generales de personas psicológicamente, socialmente, religiosamente y emocionalmente hablando, en países democráticos que desean un dictador u otro régimen autoritario o totalitario, en oposición a los felices o que al menos están contentos con el status quo o que desean un régimen más liberal? ¿Estado libertario (en oposición al autoritario)?
- ¿Qué viene primero: la felicidad o el dolor?
- ¿Qué es un punto de inflexión en tu vida que te hace sonreír o llorar?
- ¿Cuáles son algunos buenos libros para niños que le brindan una visión más profunda de la inteligencia emocional y los valores de la vida, que también son agradables para usted como adulto?
- ¿Por qué los indios están tan desesperados por elogiar pero a menudo se enojan si alguien señala su deficiencia?
Los pensamientos y juicios negativos pueden volverse “automáticos”, afectados por las creencias. Los pensamientos negativos continuos crean un estado emocional desagradable continuo, incluida la ira crónica.
La ira no es un accidente, o el resultado directo de la conducta de otros; Es el resultado de su elección en cómo interpretar estas cosas. No eres víctima de la ira; Lo has elegido.
La gente es falible; La vida es desordenada y difícil. La aceptación de esto es clave para la salud emocional. El perdón es esencial. Vivir y dejar vivir.
Todas las creencias son sospechosas y deben estar sujetas a un reexamen constante.
¡Incluyendo este! 🙂