No tengo ganas de ir a mi escuela, pero mis amigos insisten. ¿Debo escucharme a mí mismo o chuparlo e irme de todos modos?

Como ya he pasado esa etapa en particular, sé cómo se siente ahora. Como dicen, ” Los mejores días de la vida son los días escolares”. Créeme, esto es 100% cierto.

Ahora que estoy a punto de graduarme de la universidad, sigo pensando en mis días escolares cuando solíamos divertirnos mucho. Y porque en ese momento la vida era fácil, sin responsabilidades, sin preocupaciones, solo diversión. Mi hermano solía decirme esto cuando estaba en la escuela, pero no me atreví porque estaba feliz de que finalmente la escuela terminaría. Pero ahora, cuando miro hacia atrás, tengo lágrimas en los ojos porque extraño mis días de escuela y haría cualquier cosa para vivir esos días nuevamente. Pero una vez que se ha ido, no puede volver.

Además, no puede mantenerse en contacto con todos los compañeros de clase, ya que la vida cambia de forma diferente para todos. Pero aún así es genial conocer a esas personas de vez en cuando y saber que nada ha cambiado. Puedes hacer muchos amigos, pero créeme, tus amigos de la escuela siempre serán especiales.

Tienes la oportunidad de conocer a todas esas personas juntas por última vez y creo que probablemente no deberías perderte. Puede que ahora no lo necesite, pero lo lamentará más tarde si no asiste a su despedida ahora. Quién sabe, puede tener algo especial esperándote en este día en particular. Dado que las emociones están en su apogeo durante la despedida, es posible que descubras nuevas cosas sobre ti y tus amigos.

Es una oportunidad única en la vida porque nunca se sabe lo que le depara el futuro. Ve y disfruta. Al principio puede que te aburras, pero luego te alegrarás de haber ido a la despedida.