Porque todo lo que recordamos con cariño del pasado generalmente se denomina “nostálgico”.
“La infancia” es la mejor parte de nuestras vidas. Esos días sin preocupaciones, mucha diversión con los primos y las familias, atención incondicional de los padres y tíos y mucho más. Cuando crecemos, todo esto cambia dramáticamente y las cosas simplemente no son lo mismo. Y lo que sucede es que tendemos a recordar mucho y ponernos ‘nostálgicos’.