¿Por qué a veces de repente dejo de disfrutar algo sin una razón aparente?

Es una pregunta bastante abierta con diferentes posibilidades.

Es posible que “la cosa” que querías aprender no resultara de la manera en que habías imaginado que habías perdido el interés, ya que ya no encajaba en los criterios de tu imaginación.

Es posible que te haya gustado algo antes y que de repente se haya acabado, no especialmente debido a ti y, como consecuencia, no quieres poner mucho esfuerzo en gustar “la cosa” porque temes que esto pueda suceder. fin tambien

¡Es posible que hayas aprendido que “la cosa” no es tu taza de té!

También es posible que tengas una vida mundana y que de alguna manera te haya ralentizado.

Dadas las posibilidades, en el lado positivo, la próxima vez que comience a disfrutar de una nueva habilidad, intente crear una esperanza positiva hacia ella y tómela con calma. Creo que eso debería hacerte disfrutar aún más.

¡Los mejores deseos!

Nunca es sin razón, simplemente no consideraste el cambio lo suficiente como para ver por qué. A veces las razones son más profundas que una razón aparente “superficial”. La explicación más sencilla es que está listo para algo nuevo, o que ha cambiado o ha crecido con respecto a lo que estaba haciendo. Eso suele suceder cuando no estás mirando, por lo que puede ser una sorpresa.